miércoles, 28 de marzo de 2012

¡Qué fácil es manipular!


¿Has oído hablar alguna vez del error fundamental de atribución? ¿Eres una víctima de este sesgo?

Sí, todos lo cometemos, somos fácilmente manipulables. Tendemos a explicar el comportamiento de los demás por sus rasgos personales sin tener en cuenta la situación. En cambio, cuando se trata de explicar nuestra propia conducta recurrimos a las circunstancias.

El siguiente video trata sobre un experimento realizado durante el verano de 1971 en la Universidad de Stanford. Pone al descubierto cuales son los efectos psicológicos de intentar convertir a unas personas en otras diferentes, en este caso, guardias o prisioneros.

Si fueras tú  el elegido alomejor te sorprenderías. Todos tenemos una parte buena o mala. ¿Te reconocerías si tuvieras que asumir uno de los papeles mostrados en el video? ¿Guardia o prisionero?...


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